Capítulo 4 (Victor/Ana)

---- NARRA Victor: ----

Me desperté con un dolor de cabeza increíble. Eran las 8 de la mañana. Mi hermana y mi padre ya habían acabado de desayunar y estaban metiendo en la maleta las cosas de ultima hora. Fuí a la cocina y me preparé un vaso de leche con Cola-Cao.
-¡Bueeenos diiiaaaas!- me gritó mi Ana.
Le miré con cara de fastdio y ella sonrió.
-Oh! Perdona...ya no me acordaba. Estas con la resaca.- me dijo sonriendo.
-No me digas...- dije sarcásticamente. - Y como que estás tan contenta?-
-No lo estoy. Solo era para molestarte.- respondió.
-Que buena persona...- dije antes de acabarme el vaso de leche.
Ana salió de la cocina y fué a vestirse. Yo me levanté y miré en el armario donde estan los medicamentos.
-Si buscas Aspirinas, no quedan- me dijo mi padre por detrás - y date prisa que en media hora nos vamos.-
Puse los ojos en blanco y cerré de un portazo el armario, lo que hizo que me doliera más la cabeza. "Soy imbécil" pensé. Me fuí a mi habitación y me vestí. Metí en mi maleta unas ultimas cosas y la cerré. Bajé en el ascensor hasta el parking con mi padre y mi hermana, que no parava de reirse de mi.
-No te rias- le dije con voz ronca.
Lo que provocó también la risa de mi padre.


---- NARRA Ana ----

Llegamos al aeropuerto. Embarcamos las maletas y subimos al avión. Fue un viaje aburridísimo, ya que mi hermano se lo pasó durmiendo y mi padre leyendo el periodico, menos mal que era corto. Cuando llegamos a Mallorca, nuestra tia Susana nos estaba esperando en la salida del aeropuerto con el coche.
-Holaa! Cuanto tiempo!!- gritó al vernos.
Le sonreí y le dí dos besos. Mi padre hizo lo mismo y Victor también.
Los chicos metieron las maletas en el coche y yo me senté en el asiento de delante para cotillear con mi tia.
-Pues Marinadorada está cambiadísima.- nos contaba nuestra tia- Porque... ¿cuanto hace que no venis? Por lo menos...-
-8 años- le cortó mi hermano.
-Pues eso... Em, han hecho un instituto, ¿recordais que para hacer la ESO la gente se tenia que ir a otro pueblo?- prosiguió Susana.
-Si- respondió mi padre.
-No- respondimos Victor y yo al unisono.
Mi padre nos miró con mala cara.
-Pues ya no!- dijo mi tia sonriendo.
No es que Susana me cayera mal pero, no me gustaba hablar de nada relacionado con Marinadorada. Y estaba claro que a mi hermano tampoco.
-Bueno, eso significa que hay chicos de nuestra edad ¿no? - dije yo, que eso era lo que me interesaba.
-Si - me respondió riendo - y también chicas - dijo mirando a Victor por el retrovisor.
-Ya tiene novia- dije.
-Que hablas!?- gritó.
-Se llama Vanessa, va a su clase- continué.
-Mierda! No la he llamado- dijo sacandose el móbil del bolsillo.
-Ves...- le dije a mi tia.
Victor me miró con cara de asco y yo le sonreí burlonamente.
-Mierda, el contestador- gritó.
-Joder! Quieres parar de decir palabrotas!- le riñó mi padre.
-Pero si acabas de... da igual- dijo mientras se guardaba el mobil en el bolsillo.

Tras un largo viaje llegamos a Marinadorada. Susana nos dejó en la puerta del hostal donde nos ibamos a alojar. No era muy lujoso pero era el unico sitio en aquel pueblecillo. Entramos, dejamos las maletas en nuestras respectivas habitaciones y nos fuimos a visitar a la familia.
Tras 2 horas iendo de casa en casa, viendo a ancianos y gente que se supone que era mi familia, pero de la que yo no me acordaba, pasamos por enfrente del parque. Estaba lleno de niños y niñas de mi edad y de la de Victor. De repente, una chica rubia de unos 15 años se os acercó.
-Jessi!!- gritó Susana y le abrazó.- Chicos, esta es Jessica ¿os acordais de ella?- nos dijo.
-Emm...- dijimos Victor y yo.
-Ah si! ya me acuerdo! jugabamos juntas de pequeñas a hacer galletas de barro...y luego las ibamos vendiendo por las casas- dije riendome.
-Si, esa soy yo.- me dijo riendo.

------------------------------

Bueno! Hasta aki! jajajaj :)
COMENTEN PLIZ!! ;)